En algún momento de la semana pasada alguién me recordó que hacía tiempo que no hacía costillas tipo "americano". Esta receta me la facilitó una amiga mía, Almudena, hace ya bastantes años. Creo que así las hacía su madre que es una experta cocinera; ha tenido muchos hijos y me imagino que el día a día con mucha gente en casa te ayuda. Así que me fuí a la carnicería a comprar un par de costillares para hacer el fin de semana con mis hijos en casa y, al final, se fueron a pasarlo fuera. De todos modos los cocine para los que nos quedábamos y esta es mi receta.
Preparación: Se cuecen en la olla a presión las costillas con zumo de naranja (que las cubra, puede ser de brick) durante ¼ de hora. Una vez cocidas se ponen en una fuente de horno y se untan de miel. Se dejan macerar mientras se calienta el horno. Se untan con ketchup -si no tienes o no te gusta sirve el tomate frito- y se meten en el horno a 170º- turbo durante ½ hora, más o menos.
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